domingo, 29 de julio de 2012

Vino y alegría a la vera de la ría

Cuando todavía se ve la luna por el día
y el sol todavía no destella de alegría
me puedes ver correr hacia el monte
buscando la orilla de la ria.

Mira como nada!
Nada como si nada,
como si no le cortase el pecho
el agua helada y clara de la ría...

Era mañana fría
casi más de noche que de día,
pero mi sangre era de vino
y me fui a bañar a la ría.

                                      (Parra)

Que viva el vino,
la noche y la alegría!